El origen del Pulpo á feira
El origen del pulpo á feira esta en Galicia, es uno de los platos más deliciosos y tradicionales de la gastronomía gallega. Para nosotros el manjar de Galicia.
Galicia se ha convertido en el mejor lugar donde comer pulpo á feira. Si quieres conocer un poco más a historia del cefalópodo en esta comunidad autónoma, no te pierdas nada de lo que viene a continuación.
De donde viene el Pulpo á feira
La expresión de «pulpo á feira» proviene de las ferias de los maragatos, quienes volvían de las tierras gallegas con el pulpo seco. Se trata sin duda, de uno de los pocos alimentos marinos que viajaban, en aquellos años, a la meseta.
Hace más de un siglo y medio, el pulpo llegaba a la maragatería y se rehidrataba con aceita de oliva, sazonándolo con pimentón, el cual era vital en su conservación.
Como ves, el pulpo ya se condimentaba con pimentón, sal gorda y un buen chorro de aceite de oliva.
Recuerda que, pulpo á feira, no es lo mismo que pulpo a la gallega, ya que este último plato consiste en el acompañamiento de patatas cocidas.
El pulpo se sirve en platos de madera
La mejor forma de servir el pulpo á feira es en platos de madera. Están elaborados con madera de pino y sí, también es una tradición.
Los platos de madera se empapan con el agua de la cocción del pulpo justo antes de cortarlo. De esta forma, el pulpo mantiene la temperatura y evita enfriarse tan rápido. Además, al estar empapada la madera, se evita que el aceite de oliva del aliño se absorba. De ahí, que sea común mojar un poco de pan.
Esta forma de servir el pulpo también tiene sus orígenes junto con la aparición del pulpo á feira en Galicia. La venta del pulpo, en aquel entonces, era una profesión ambulante y las pulpeiras viajaban de pueblo en pueblo para proceder a su venta.
Debido a las angostas rutas que debían recorrer, los materiales debían ser resistentes, de ahí que todo fuera de cobre, para evitar la rotura de los utensilios. Además, la temperatura se mantenía mucho mejor.
Esta entrañable historia no termina aquí. Los platos de madera de las pulpeiras se grababan con los nombres, para que fuera mucho más fácil su localización durante las ferias.
Ahora ya sabes por qué el pulpo á feira se sirve en platos de madera y por qué es una tradición tan arraigada en Galicia.
El mejor pulpo de Galicia está en el interior
El mejor pulpo de Galicia no se saborea en la costa, sino en el interior, a kilómetros del mar. Donde décadas de tradición han convertido este manjar en un plato típico de Galicia.
Todo aquel que visite Galicia no puede marcharse sin probar el pulpo á feira. El pulpo gallego tiene sus orígenes en el siglo XII, en el Monasterio de Oseira.
Diego Arias un joven soldado recibió el coto de Marín, hasta que su mujer falleció. Luego decidió hacerse monje en el Monasterio y dejó en herencia el coto de Marín.
Es entonces cuando el pulpo llega al interior de Galicia. Era un pago comercial que realizaba la gente de Marín a los monjes.
El pulpo era fácil de transportar y de conservar. Los arrieros lo transportaban en carros por todas las comarcas. Se comenzó a repartir entre los fieles y popularizándose.
Fue así como se convirtió en un plato presente en las ferias, de ahí su nombre de «pulpo á feira», donde destacan la figura de los pulpeiros y pulpeiras como grandes impulsores.
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